Contáctanos

Rumania

Rumania se tambalea tras la toma de poder bipartidista: la alianza PSD-PNL genera temores de un golpe constitucional.

COMPARTIR:

Publicado

on

Usamos su registro para proporcionar contenido en las formas en que usted ha dado su consentimiento y para mejorar nuestra comprensión de usted. Puede darse de baja en cualquier momento.

Rumania se ha sumido en el caos político el mes pasado cuando el gobernante Partido Socialdemócrata (PSD) y el Partido Nacional Liberal (PNL) firmaron una alianza aparentemente improbable que ha generado serias preocupaciones sobre un esfuerzo coordinado para desmantelar las instituciones democráticas de Rumania, y los críticos llaman es un golpe incruento.

El gobierno de Rumania, encabezado por el partido “socialista” del primer ministro Marcel Ciolacu, enfrenta acusaciones de erosionar los procesos democráticos. Los partidos de oposición y varias ONG afirman que las elecciones conjuntas previstas para el Parlamento Europeo y los funcionarios locales representan un ataque a la Constitución y un retorno a prácticas autoritarias.

2024 marca un año único en la democracia poscomunista de Rumania. Los votantes serán convocados a las urnas un número récord de cuatro veces, con elecciones separadas para el Parlamento Europeo, los consejos locales, el Parlamento y la Presidencia. Este intenso maratón electoral ha generado preocupaciones sobre la fatiga de los votantes y los desafíos logísticos de gestionar un volumen tan alto de encuestas.

¿La posible solución? Fusionando algunas elecciones. Las propuestas han incluido combinar las elecciones locales con la votación del eurodiputado en junio o alinear las elecciones parlamentarias con una de las rondas presidenciales más adelante en el año. Estas consolidaciones podrían aliviar la carga tanto para los votantes como para las autoridades electorales. O eso afirman los partidos gobernantes.

Sin embargo, la propuesta de fusionar simultáneamente las elecciones locales y europeas ha provocado indignación. Los opositores argumentan que tal medida ignora los procedimientos electorales establecidos y socava el derecho fundamental de los rumanos a expresar libremente su voluntad en las urnas. Señalan la jurisprudencia establecida del Tribunal Constitucional, que prohíbe cambios apresurados en la legislación electoral en años electorales.

Las elecciones locales deberían haberse celebrado inicialmente en septiembre, pero con los últimos cambios electorales los ciudadanos serán convocados a votar por sus representantes locales en junio. Los críticos dicen que esto crearía un caos administrativo en el país, ya que Rumania tendrá un sistema paralelo de alcaldes y concejales, con funcionarios gobernantes al mismo tiempo que funcionarios electos durante casi tres meses.

Además, se han expresado preocupaciones sobre el compromiso del gobierno con las obligaciones internacionales, como el Código de Buenas Prácticas en Materia Electoral, adoptado por la Comisión Europea para la Democracia a través del Derecho, o la Declaración Universal de Derechos Humanos.

Anuncio

Rumania es signataria de tratados que defienden el papel esencial de las elecciones libres en las democracias que funcionan. Los críticos argumentan que la celebración de elecciones conjuntas contradice directamente estos compromisos, principalmente porque la complejidad de las operaciones electorales puede dar lugar a la exclusión de votantes que, independientemente de su voluntad, no podrán votar dentro del plazo legal existente.

Los analistas siguen divididos sobre las motivaciones detrás de esta improbable alianza PSD-PNL y los cambios posteriores introducidos en las leyes electorales existentes. Algunos señalan que las cifras de las encuestas están decayendo tanto para el PSD como para el PNL, lo que sugiere un intento conjunto desesperado por garantizar que los partidos permanezcan en el poder. Otros especulan sobre la posibilidad de acuerdos secretos, con promesas de inmunidad frente a cargos de corrupción o puestos gubernamentales lucrativos.

Las encuestas predicen un dramático ascenso del partido de derecha AUR en las próximas elecciones en Rumania. Los analistas sugieren que AUR podría superar tanto al Partido Nacional Liberal, el socio menor de la coalición gobernante, como al Partido Socialista Demócrata, convirtiéndose en el partido más grande de Rumania. Si bien es poco probable que AUR se una al próximo gobierno, la creciente influencia del partido ha hecho que algunas personas especulen que el esfuerzo coordinado para cambiar las leyes electorales tenía como objetivo impedir que AUR amenazara a la coalición gobernante PSD-PNL.

Mientras Rumania se dirige a las urnas, una cosa es segura: la comunidad internacional debe permanecer alerta para defender la democracia y garantizar la rendición de cuentas dentro del país. El hecho de que la Unión Europea haya guardado silencio sobre este tema es preocupante, pero habrá que esperar y ver qué sucede en las próximas semanas.

Comparte este artículo:

EU Reporter publica artículos de una variedad de fuentes externas que expresan una amplia gama de puntos de vista. Las posiciones adoptadas en estos artículos no son necesariamente las de EU Reporter.

Tendencias