Tsikhanouskaya había establecido previamente un 'Ultimátum del Pueblo' para que Lukashenko renunciara el domingo por la noche, prometiendo convocar una huelga nacional si no lo hacía.
"El régimen mostró una vez más a los bielorrusos que la fuerza es lo único de lo que es capaz", escribió Tsikhanouskaya en un comunicado. "Por eso el 26 de octubre comenzará un paro nacional".